“Para atender a este mercado (millenials), hay que volver a imaginar cómo administrar y mover el dinero, porque en los próximos 5 años va a haber en el sector financiero más cambios que en los últimos 30”.
Esta frase de Dan Schulzman, CEO de PayPal, define a la perfección el espíritu fintech, un sector que cada vez tiene más presencia en nuestra sociedad.
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¿Qué son las Fintech?
Las fintech o tecnologías financieras han explotado en los últimos años, y su desarrollo parece imparable, apareciendo cada día nuevas plataformas, aplicaciones y empresas que desempeñan su labor en este sector.
Su objetivo principal podría parecer simple, pues no tratan ni más ni menos que de hacer más simple cualquier tipo de transacción financiera, con la mediación de la tecnología.
Para poder llevar a cabo su labor, las fintech se sirven de tecnologías como el cloud computing, el big data, el machine learning o la inteligencia artificial. De cara a sus usuarios, desarrollan plataformas con interfaces sencillas que son accesibles desde cualquier smartphone u ordenador.
Cómo mejoran las Fintech los procesos financieros
Para entender mejor en qué ayudan las fintech a los usuarios, podemos repasar algunos casos, como por ejemplo el de los pagos online. En este campo se ha pasado de procesos de varios pasos, caros y complejos a sencillos pagos de un solo paso, mucho más eficientes para usuarios y empresas.
Igualmente, en el sector de las aseguradoras, el desarrollo de las fintech ha favorecido la aparición de comparadores de precio que simplifican el proceso de decisión de quienes se interesan en contratar una póliza
En el sector de los préstamos también ha tenido un fuerte impacto, ya que las fintech, en colaboración con los bancos y otras compañías financieras tradicionales, hacen posibles servicios como préstamos instantáneos a través de una app.
¿Qué es lo próximo en el mundo de las Fintech?
En el último eFintech Show, celebrado hace unas semanas en Barcelona, salieron a la luz algunas de las tendencias que marcarán el sector en los próximos meses:
Neobanks: Son aplicaciones como Ipagoo o BNXT con las que puedes disponer de cuentas y tarjetas para sacar dinero sin necesidad de asociarte a una entidad bancaria física. No requieren licencia del Banco de España porque no negocian con el dinero que se deposita en ellos.
Blockchain: Es el soporte tecnológico en el que se basan las operaciones que se producen en el ámbito financiero. Su función es la de validar y registrar todas las operaciones que se producen en un entorno digital. De su desarrollo dependen en buena medida los avances en tecnología fintech. Si quieres saber visita este artículo en el que te contamos qué es el blockchain.
Wealthtech: Dentro del amplio universo fintech, las llamadas wealthtech están surgiendo para facilitar la gestión de las inversiones propias y los patrimonios, que hasta ahora han requerido de complejos procesos que incluían multitud de trámites administrativos para los usuarios.
Regtech: Startups enfocadas al compliance, que desarrollarán aplicaciones que facilitarán la vida a las entidades financieras automatizando el cumplimiento de las exigentes normativas regulatorias en las que se desenvuelve el sector.
Proptech: Otro de los sectores que vienen pisando fuerte en el mundo fintech. Se refiere a las empresas que combinan la tecnología con el mundo inmobiliario, y simplifica muchas de las barreras que normalmente se encuentra el usuario que quiere realizar una inversión en real estate.
ICOs: Corresponde a las siglas de Initial Coin Offering (oferta inicial de monedas en castellano), y su función es vender tokens a los primeros usuarios de un ecosistema de criptomonedas a cambio de las propias criptomonedas. Dicho de otra forma, el objetivo de las ICO es conseguir fondos para su empresa, y no siempre están sujetas al marco legal.
Y para finalizar, te dejamos esta infografía que resume a la perfección cómo se distribuyen los distintos actores del sector fintech en nuestro país.
(Fuente: spanishfintech.net)