Descubre todos los beneficios de los espacios de trabajo compartidos
El mundo de las nuevas tendencias en gastronomía está lleno de reticencias o ideas preconcebidas como la cocina sin sustancia y los menús excesivamente vanguardistas. Pero también de experiencias llenas de ideas y platos provocadores. El restaurante Montia, situando a escasos 500 metros del Real Monasterio de San Lorenzo, es el lugar donde esos platos cobran vida y donde las reticencias se desvanecen.
La propuesta de este joven proyecto es arriesgada y moderna – Para empezar, no hay carta. Se trata de confiar en que lo que te cocinen, te va a gustar. El menú, está sujeto a la disponibilidad de los productos de Madrid y su sierra, y es tan cambiante (con frecuencia semanal y absolutamente sorpresa) e impredecible que depende, en ocasiones, hasta de la propia climatología.
El propio espacio con tan solo un puñado de mesas y una decoración sobria y alejada de las modas, te anticipa su filosofía de apreciar más la esencia que el artificio.
Este joven restaurante, de poco más de tres años de edad, empeñado en alejarse de lo comercial, está alejado de la zona de tránsito más turística. Tanto esto como su decisión de no contemplar los grupos grandes con el objetivo de prestar la máxima atención a los comensales, ha sido pensado para no crear distracciones y que así puedas disfrutar de una experiencia gastronómica sumamente personal. De todo ello se encargan Daniel Ochoa y su equipo que, inspirados «por los aromas y sabores que encuentran paseando por la sierra», están dispuestos a buscar siempre nuevos elementos que añadir a sus elaboraciones.
El mimo es innegable: uno a uno los propios chefs se acercan a cada mesa para describir cada uno de los platos que han cocinado con sumo esmero. Su selección de productos y vinos biodinámicos y ecológicos se aleja de lo convencional y deja poco espacio al aburrimiento y la indiferencia.
Todos estos detalles han ido generando un boca a boca que además de aumentar su lista de espera para reservas, culminó en su primera estrella Michelín en 2014. Dan ganas de reservar hoy mismo, aunque sea para disfrutarlo ya en mayo, eso sí.
Tanto Montia, Montia tanto, innovar o rehacer, romper reglas o crearlas, siempre y cuando te levantes de la mesa con el paladar y el corazón totalmente conquistados.